
Pero una noche te despertarás y verás que eso no es verdad, el sueño se ha vuelto contra ti, nunca se hará realidad y ya eres viejo. No se ha cumplido y jamás se cumplirá porque nunca harás nada para que se cumpla. Lo enterrarás en la memoria y después te hundirás en tu sillón, y te quedarás hipnotizado delante del televisor el resto de tus días.
No hay razón, ni buena ni mala para vivir o morir...
No hay comentarios:
Publicar un comentario